No sabía qué esperar cuando vi la enorme polla de mi padrastro por primera vez. Pero me impresionó muchísimo. Sabía cómo usarla en mi cuerpo de universitaria, haciéndome gemir y gritar de placer. ¿Y esas tetas mías? No podía apartar las manos de ellas. Fue una noche que jamás olvidaré.
10:07
24:31
8:35