Hace mucho tiempo, una rubia guapísima le enseñó un montón de cosas picantes en clase. Ahora, años después, su reencuentro es apasionante, con sus enormes tetas rebosando bajo su lencería de encaje. La forma en que le mete su enorme polla es digna de admirar. Y, entre nosotros, ¡le está poniendo los cuernos a su afortunado esposo!