Una exuberante latina colombiana se queda fuera de casa vestida solo con una tanga sexy. Su vecino, Vergon, no puede evitar mirar ese trasero jugoso que pide a gritos una nalgada. Ella llama a su puerta, con los pechos rebotando, y le pide usar su teléfono. Una vez dentro, la polla de Vergon no puede resistirse a su cuerpo curvilíneo. La dobla, le da una buena nalgada y la penetra profundamente, haciéndola gritar "papi" una y otra vez hasta que se corre sobre su pene.