La erección matutina se convierte en una bestia palpitante al despertar junto a la novia de mi mejor amigo; su enorme coño descansa tentadoramente a mi lado. Como castigo a su hombre por llegar tarde anoche, me recibe con una sonrisa pícara. Despierto junto a su gran trasero brasileño al descubierto; su coño es tan grande y expuesto que no puedo resistirme. Agarra mi gran polla, susurrándome obscenidades en portugués. Me deslizo dentro de ella, sin condón. Gime, chupándome profundamente, follándome con fuerza hasta que eyaculo en una mamada matutina alucinante.
15:31
12:16
8:57