A mi hermanastra rubia amateur le encanta chupar pollas. Como madrastra, sabe cómo despertarme como un rayo, babeando sobre mi polla antes de cabalgarme con fuerza. Mete su culo en mi regazo, disfrutando cada centímetro como una profesional. Luego, se da la vuelta y me deja embestirla a cuatro patas hasta que me corro, lo que nos hace llegar tarde a la iglesia.
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