Rissa, una morena de 18 años, quiere la opinión de su hermanastro Juan sobre sus tetas. Siempre lo ha pillado mirándola, pero ahora está lista para dar un espectáculo. Se desnuda, mostrando su despreocupada adolescencia mayor de 18 años y suplicando su opinión médica. Juan, que la desea en secreto, no puede resistirse. Está duro como una piedra, listo para una mamada. Rissa, provocando, empieza a chupar, y entonces empieza: sexo hardcore a cuatro patas. La habitación se llena de sudor, rizos y bofetadas, sonidos de sexo que suben el termómetro a punto de explotar.
Visitar el sitio de patrocinador