Me arrodillé y rodeé con mis labios la palpitante polla de mi padrastro. Fue muy duro conmigo, me golpeó la boca mientras yo me atragantaba y le hacía una garganta profunda en la ducha. Luego me hizo beber su orina caliente y salada, dejándome completamente satisfecha y rogando por más de su dominación BDSM.