Estos mecánicos grasientos acaban de cerrar el taller, pero sus pollas siguen trabajando duro. Se quitan esos uniformes sucios, revelando sus pollas palpitantes, listas para divertirse al aire libre. Follando sobre el capó de un coche, estos tipos saben cómo excitarse mutuamente. Un tipo le pajea la polla a su amigo hasta que ambos se corren por todo el garaje. ¡No son solo motores ronroneando en este taller de mierda!