Fui al drive in con la esperanza de un viaje salvaje. Encontré a otra zorrita para follar a mi puta amateur, casada y caliente. Lo necesitaba con urgencia, ambos no andan con juegos. Ella se la chupó... como una zorra y él le folló el coño hasta que gimió como una perra en un paraíso interracial de alta definición. ¿Yo? Solo un cornudo sentado en la esquina, volviéndose loco mirando... ¡Joder!