Athenea Rose, la estrella porno tatuada, está sola en casa con su hermanastro Max Betancur. Lo encuentra relajándose en la sala y decide subir la temperatura. Empieza chupándole la polla, haciéndole una mamada húmeda. Max está duro como una piedra y listo, así que Athenea se inclina sobre el sofá, lista para una follada a cuatro patas. Él la embiste, con su espalda tatuada reluciente de sudor. La voltea y la toma en la postura del misionero; sus gemidos resuenan en la casa vacía.