Un cabrón colgado no puede dejar de masturbarse en un estacionamiento público, casi lo atrapan
En un aparcamiento público abarrotado, un exhibicionista aficionado no puede contener sus impulsos. Saca su polla enorme, acariciándola como si no hubiera un mañana. La emoción de ser descubierto le hace supurar líquido preseminal como un colador. A este bisexual no le importa quién lo vea: chicos, chicas, le encanta todo. Se folla el puño, mirando a su alrededor, disfrutando del riesgo. Los coches pasan, el zumbido de los motores, lo que aumenta la excitación. Su polla palpita, sus testículos se aprietan, lista para explotar. Un tipo pasa, le llama la atención y sonríe con suficiencia. Joder, eso casi lo excita. Le encanta, le encanta el espectáculo público, su polla se contrae con cada embestida. Esto es el mejor momento del sexo amateur, una polla enorme en exhibición, lista para explotar.
