A Lorenadoll se le cae la mandíbula cuando la toalla de David Bander cae al suelo, revelando su enorme polla negra. No puede resistirse y cae de rodillas, ansiosa por chuparle la polla. Esta amateur lo recibe como una profesional, atragantándose con su verga antes de inclinarse sobre la encimera de la cocina. David le penetra el estrecho coño con fuerza en posición de perrito, y luego se deja montar en vaquera y marcha atrás. Sus gemidos resuenan en la cocina mientras recibe una cogida inolvidable.