Es una zorra anal, ansiosa por más mientras él le mete los dedos en el culo. Cada embestida la hace suplicar más fuerte. Él accede, embistiéndole el culo hasta que grita de placer; su orgasmo anal es tan intenso que se siente como un puñetazo en el estómago. A ella le encanta, incitándolo: "¡Más fuerte, fóllame más fuerte!". Esta amateur no se cansa de la mezcla de dolor y placer.