En un festival de sexo amateur, le ofrecí mi culo ansioso al viejo cachondo de mi mejor amiga. Este semental no es un tío cualquiera; es una estrella porno experimentada que adora el sexo anal. Se zambulló, follándome como un profesional, haciendo de mi culo su patio de recreo. Fue crudo, fue guarro, y fue todo lo que soñé. Nada de joder, solo acción gay pura y dura que me dejó con ganas de más. Mi culo era suyo por una noche, y lo tomó hasta el último centímetro.