Es una tímida amateur japonesa, pero la enorme polla de su padrastro está a punto de cambiar eso. Se desliza profundamente en su estrecho ano, haciéndola gemir: "¡Papi, es demasiado profundo!". Este polvo interracial es una locura; ella es solo una chica que lo recibe hasta las pelotas, disfrutando cada centímetro.