En una discoteca abarrotada de São Paulo, encontré a un tipo con ganas de acción. Justo en la pista de baile, con todos mirándome, convertí a ese cabrón cachondo en mi perrita. Se convirtió en mi puta amateur pública, cogiendo cada centímetro en POV. Este encuentro gay tan sexy fue más excitante que cualquier escena de estrella porno.