Thalia tiene un as bajo la manga para aprobar el examen de conducir: seducir a su cachondo profesor, Felipe. Esta adolescente amateur sabe cómo conseguir lo que quiere, incluso si eso implica un polvo intenso en el coche. Lo provoca con su cuerpo firme, acariciándole la polla hasta ponerla dura como una piedra. Felipe no puede resistirse a su encanto travieso, machacando su coño hasta que eyacula y gime pidiendo más. Thalia no parará hasta obtener su carnet y una cara llena de semen.