Una india recién casada recibe una brutal penetración de su hambriento sasur. Esta zorra amateur se mete su gruesa polla hasta el fondo, atragantándose con ella antes de inclinarse para una intensa follada a cuatro patas. Su estrecho coño es penetrado con fuerza, tomando cada centímetro como una profesional. No es ninguna tímida, grita y gime mientras la llenan hasta el borde. A esta reina de la garganta profunda le encanta una buena follada dura, y su sasur está más que feliz de complacerla.