Una morena cachonda se despierta en la orilla, con sueños anales tan intensos que ya está empapada. Necesita una polla con urgencia. Encuentra a un semental en la playa y se pone a cuatro patas, suplicando que la ponga a cuatro patas. Él se la mete con fuerza, y luego ella se sube encima, a lo vaquera, cabalgando hasta gritar, corriéndose como en su sueño.