Amanda Riley, una impresionante trans amateur, envuelve con sus labios la palpitante polla de Steve Rickz, haciéndole una mamada descuidada que lo deja gimiendo. Esta cachonda belleza no solo busca juegos bucales; anhela el sexo anal. Steve la inclina, deslizando su polla en su estrecho ano, embistiéndola con fuerza. Ella gime, disfrutando de cada embestida. Amanda se sube encima, cabalgándolo a lo vaquera, con su culo rebotando contra sus caderas. Cambian a la postura del misionero, Steve la penetra profundamente, ambos buscando el clímax.