Está hablando con su novio por teléfono, pero a mi polla le da igual. Esta morena está de rodillas, con mi polla en la boca, chupándomela como una estrella porno amateur. La agarro del pelo, empujándola más adentro, con los ojos llenos de lágrimas mientras tiene arcadas. Luego, la tiro en la cama, al estilo misionero, embistiendo su coño infiel hasta que grita.