Me desperté con una morena sexy a horcajadas sobre mí. Resultó ser la mejor amiga de mi hermanastra, una aficionada guapa que quería practicar sus habilidades de cabalgata. Se agachó, me hizo una mamada excepcional y luego se montó encima para el polvo mañanero más salvaje de mi vida. Esta chica era insaciable, meneando las caderas como una profesional.
 
 
 
 
 
 
 
