Cleopatra, la reina egipcia, recibe una cogida regia, ahogándose con una polla enorme embestida hasta el fondo de su garganta. Se atraganta, con los ojos llorosos, mientras la gruesa verga la penetra sin parar. Esta intensa garganta profunda la deja con la mirada fija al frente, con la intensidad grabada en su rostro. Una descarga de semen le baja por la garganta, provocándole una follada facial inolvidable.