La zorra rubia Lesana necesita dinero y su marido no se lo da, así que se dirige a un hotel de lujo a por unas propinas rápidas. Chupando pollas como una aficionada convertida en profesional, se gana las facturas de rodillas. De vuelta en su habitación, cabalga la polla de un desconocido en vaquera, recibiendo profunda y brutalmente a cuatro patas. Una auténtica zorra infiel, le encanta el dinero y la d.