La cachonda Daniela Gómez, con una polla enorme, busca la ayuda de una terapeuta tetona. Necesita más que solo hablar; anhela un polvo duro. El dúo, obsesionado con el sexo, convierte la oficina en su festín sexual personal: tetas rebotando, pollas palpitando y coños chorreando. ¡La terapia nunca se sintió tan bien!