No pudo resistirse a echarle un vistazo a su paquete, y ¡madre mía!, el novio de su vecina estaba buenísimo. Una polla gruesa y palpitante que prometía puro placer. Con razón tenía esa sonrisa arrogante; sabía que estaba dotado como un caballo. Ahora, ansiaba probarla, se moría por sentir ese monstruo estirándola. ¿Quién podría culparla? Esa polla grande y gruesa es una tentación demasiado buena para dejarla pasar.
WHO ARE THEY PLEASE I BEG OF YOU
WHI ARE THEY
Play