Mi cuñado es un maldito pervertido, siempre mirándome como a un pedazo de carne. Quiere doblarme, follarme el culo apretado. Le va el hentai yaoi, pero maldita sea, este tío es insaciable. Músculos a la altura, polla palpitante, es una bestia bara lista para saltar. Joder, está mal, pero eso lo pone aún más cachondo. Sudando, respirando agitadamente, es una fantasía sucia hecha realidad, con ganas de follar como animales.