Mi hermanastra le apostó a su amiga que me haría correrme en minutos. ¡Tío, se volvió loca, chupando y follando como una profesional! ¡Menuda bomba de sexo! Me hizo correrme en un santiamén, dejándola orgullosa como un demonio, sonriendo con la leche goteando por su cara. ¡Intenso como la pólvora, tío!