Este tío quería que le rompieran el culo, así que le hicimos un trío salvaje, follándolo con fuerza y llenando su hambriento agujero con nuestra leche. Lo suplicó, y le cumplimos, embistiendo su ansiosa polla hasta que gritó pidiendo más. Tres pollas lo penetraron, dejándolo completamente lleno de nuestra leche. Una fantasía hecha realidad, y un pasivo hambriento satisfecho.