Katie, una milf cachonda, decide que es hora de una noche salvaje en casa. Invita al musculoso amigo negro de su hijastro a dormir. La guarrilla no puede apartar las manos de su gruesa y palpitante polla, y pronto la monta como una vaquera en celo. Esta traviesa madrastra no parará hasta vaciar hasta la última gota de esa enorme verga. ¡Prepárate para un festín de sexo caliente lleno de groserías y acción atrevida!