Fue una vista increíble mientras tomaba su polla gruesa y suave en mi boca. Justo cuando empezaba a hacerle una garganta profunda, el novio de Junior se despertó y nos pilló en el acto. Pero en lugar de enfadarse, se unió y le hicimos una mamada estupenda juntos. Lo rematamos con una corrida desordenada que nos dejó a todos cubiertos de semen. La escena casera fue monísima y ardiente, y todos disfrutamos cada momento.