Su esposa llevaba semanas deseando un masaje, así que su marido la envió a un profesional. Lo que no sabía es que este masajista estaba más interesado en sus grandes pechos y su coño que en darle un masaje relajante. Se entregó al voyeurismo en primer plano mientras ella yacía desnuda ante él, una milf atractiva de ascendencia árabe. Su marido cornudo jamás habría imaginado el placer que ella encontraba en su mesa.